Archivo de febrero, 2016

SONETOS PARA SAN VALENTIN

hace 8 años

por Madrigal en Tú también cuentas

Diálogo en dos sonetos para S, Valentín
CON HEBRAS DE SUTURA

Con hebras de finísima sutura
vas fundida en la urdimbre de mi trama.
En amor te he injertado, verde rama,
y te amarro a mi recia arboladura.

Inyectas vida y luz desde tu altura
al tronco herido que tu amor reclama.
La sangre enardecida, en plena brama,
busca la unión total y con premura.

Beberé de tus labios ambrosía.
El ansia de tus besos me devora.
Me resisto a soñar tu compañía.

De sentir tu presencia es tiempo y hora,
pues que lo es de calmar esta ardentía.
Llégate amor, todo mi ser te añora.
EL

CIÑEME AMOR

Cíñeme amor, mitiga mi ardentía
y apaga en mi ésta sed. Pues me devora…
si has de venir amor, ¡llégate ahora
a poner en mis labios ambrosía…!

Soñar déjame amor tu compañía,
iré, tras el delirio que enamora,
todo en mi ser amor, ¡todo te añora!
¡Y no acudes amor a mi porfía!

Tráeme diafanidad desde tu altura,
refresca la pasión que arde en mi llama,
mi sangre está enervada, y te reclama,

Amárrame a tu recia arboladura..
tómame amor, seré urdimbre en tu trama,
¡Úneme a ti con hebras de sutura…!
ELLA

Madrigal

REAL

hace 8 años

por comunero en Tú también cuentas

REAL

LLega un momento
que todo se acaba,
que ya nada importa,
que lo que digan
te lo sabes ya de sobra.
Y por un momento
te paras y reflexionas
y piensas en cosas
que antes ni te parabas,
cosas pequeñas,
detalles sin importancia,
distintas perspectivas
que te hacen creer
que estás fuera.
Si, como si estuvieras
fuera del cuerpo este que ocupas
el que te está manteniendo vivo,
este que tu le alimentas
y el que te sujeta la cabeza
para que puedas pensar
como yo ahora.
Bueno, pues a lo que vamos,
parece, en este momento,
que me evado del cuerpo,
que pienso como un pájaro
que mira desde el cielo
y me veo aquí, sentado,
escribiéndote esto que estás leyendo
pero que en realidad
veo más.
Porque desde allí arriba
se ve más.
Y como estás en otro plano
nadie te puede ver,
porque lo que ven es
un cuerpo sentado
delante de una pantalla
que escribe, como un robot,
lo que le dicta el otro “yo”
que está allá arriba mirando.
Y es bonito lo que se ve.
No me importa que tu
hagas o digas lo que quieras
porque no me afecta,
no me distrae de lo que quiero ver
y lo que veo es…
REAL.